La tecnológica cree que es el momento de pasarse al autoconsumo e intenta convencer a los más escépticos mostrándoles a golpe de clic lo que podrían ahorrar instalando paneles solares. Google ha dado a conocer esta semana su última aventura renovable: Project Sunroof, una nueva herramienta que se vale de Google Maps para saber cuándo es o no viable instalar paneles solares para el autoconsumo en cualquier edificio.
Simplemente introduciendo una dirección, Sunroof cuantifica la cantidad de rayos de sol que inciden al año sobre el tejado (teniendo en cuenta su orientación, la climatología de la zona o las posibles sombras de árboles u otras construcciones), mide el espacio disponible para colocar los paneles solares y calcula el coste y el ahorro que podría suponer para el usuario llevar a cabo la instalación.
Para saber si este cambio es ventajoso, lo nuevo de Google tiene en cuenta el importe medio del recibo de la luz que se paga en cada hogar y la posibilidad de que el usuario compre, alquile o recurra al leasing para hacerse con los paneles. Además, pone en contacto al usuario con los principales proveedores de esta tecnología.
Así, esta herramienta acaba con el trámite de consultar a un profesional o de realizar complicados cálculos autodidactas sobre la conveniencia de contar con algún generador de este tipo en nuestros hogares y lo reduce todo a un único clic.
De momento Sunroof sólo está disponible para algunas zonas de EEUUcomo Boston, Fresno, California y la bahía de San Francisco, pero ya hay planes de expandirlo a todo el país y al resto del mundo. Por otra parte, aunque la herramienta está destinada a los usuarios domésticos, también se puede aplicar a zonas industriales o a la sede de cualquier empresa para que éstas sepan las ventajas y los inconvenientes de pasarse a las renovables, si es que aún no lo han hecho.
No es la primera vez que Google muestra su interés en el campo de las renovables y en la reducción de emisiones contaminantes. De hecho, una de las metas de la tecnológica es convertirse en una compañía completamente abastecida por fuentes ‘verdes’ en un futuro. Con este objetivo en mente, Google ya alimenta la mayoría de sus centros de datos a base de energía limpia de plantas de los alrededores, una práctica que también llevan a cabo otros gigantes del sector como Apple o Facebook.
Además, pone a prueba nuevas formas de generación eléctrica en su campus de Mountain View donde, hace ocho años, se instaló el mayor sistema de paneles solares corporativos del mundo (1,7 MW). Otro ejemplo de esta búsqueda constante de la innovación en este campo son los aerogeneradores-cometa Makani.
Asimismo, la tecnológica realiza múltiples inversiones en este sector como las que efectuó en la ‘superautopista de renovables Atlantic Wind Connection, en el parque eólico de Shepherds Flat (uno de los mayores del mundo) y en multitud de firmas dedicadas a la fotovoltaica y a la instalación de paneles solares como Recurrent Energy, Brightsource o Solar City, compañía del presidente y fundador de Tesla Elon Musk.