El Gobierno subvencionará hasta el 80% de proyectos desarrollados por municipios de menos de 20.000 habitantes encaminados a la mejora de la eficiciencia energética, entre los que se ha incluido la instalación de placas solares de autoconsumo de electricidad.

En el caso del autoconsumo fotovoltaico, tanto aislado como conectado a la red eléctrica, los proyectos elegibles por el programa estatal han de tener una potencia instalada superior a 5 kilovatios (kW) y conllevar inversiones de entre 50.000 y un millón de euros.

Estos detalles aparecen recogidos en el real decreto 616/2017 acerca de la concesión de subvenciones a proyectos singulares de entidades locales que favorezcan el paso a una economía baja en carbono como parte del programa Feder para el periodo 2014-2020.

La norma, aprobada el pasado viernes por el Consejo de Ministros y publicada en el BOE de este sábado, permitirá destinar 336 millones de euros al desarrollo de estos proyectos.

El porcentaje de cofinanciación con fondos Feder varía en función de los índices de desarrollo establecidos por el programa, y va del 50% en Madrid, Cataluña, Navarra, País Vasco, Baleares o Aragón al 80% de Andalucía, Asturias, Extremadura o Galicia.

El programa identifica 16 medidas concretas, entre las que se incluyen el autoconsumo en sus diversas modalidades, así como geotermia, instalaciones solares de calor, redes de distribución de fluidos térmicos o sistemas de bomba de calor.

Al combinarse con el Fondo Nacional de Eficiencia Energética, el plan permitirá movilizar más de 500 millones de euros y se convertirá en la mayor ayuda en el ámbito de la eficiencia energética destinada hasta la fecha a pequeños municipios.

Las subvenciones se concederán por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) y están destinadas a cerca de 7.700 entidades locales, así como Ceuta y Melilla.

Para obtener la ayuda, los municipios deberán reducir las emisiones de dióxido de carbono mediante la ejecución de proyectos singulares de ahorro y eficiencia energética, movilidad urbana sostenible y uso de energías renovables.

Fuente: El Economista